El Sevilla, único equipo andaluz de esta temporada que ha disputado competición europea sigue su camino para disputar una nueva final internacional. El rival era el Shakhtar, un conjunto nada fácil de batir, aún menos en casa, pero los de Emery lograron sacar, pese a todo, un resultado positivo.
El partido de ida de semifinales acabó en empate entre Sevilla FC y Shakhtar Donesk pero con un resultado dulce para el conjunto andaluz, que se marchó con ventaja en la eliminatoria. El Sevilla depende del Pizjuán para disputar su 3ª final europea consecutiva.
Fue un encuentro apasionante, digno incluso de Champions League, realmente disputado y competido entre Sevilla y Shakhtar en Ucrania y no pudo comenzar mejor para el conjunto español.
El Sevilla se adelantó en el marcador muy pronto, gracias al tempranero gol de Vitolo en el minuto 5. El canario marcó un golazo para enmarcar en jugada personal y puso al Sevilla por delante en la eliminatoria muy pronto.
No obstante, el conjunto local reaccionó tras el tanto de los hispalenses, y antes del descanso llegó la réplica del gol de Vitolo por medio de Marlos, que empató en el minuto 23, y muy poco después, en el 35, los ucranianos aprovecharon otro desajuste defensivo para ponerse por delante.
El encuentro se marchó con ventaja para los locales al descanso, fruto de la relajación excesiva tras el primer tanto del Sevilla, sin embargo, la segunda parte fue por completo para los andaluces, que dominaron en juego y ocasiones y merecieron, al menos, el tanto del empate, aunque este tardó en llegar.
En la segunda mitad se marchó Konoplyanka y entró el danés Krohn-Dehli, quién cayó en poco tiempo gravemente lesionado. El conjunto sevillista, actual bicampeón de Europa, supo rehacerse de ese duro golpe moral y del marcador adverso para sacar de Ucrania un resultado positivo.
El tanto del empte tardó hasta el minuto 82, pero llegó. Tuvo que aparecer Gameiro, el jugador más importante del conjunto de Unai Emery, que ya había tenido más de una ocasión clara pero no estaba teniendo su día.
El providencial partido de Vitolo quedó coronado cuando provocó un penalti en la recta final del partido, tras un regate en el área que el rival que le cubría no pudo evitar comerse. El francés, máximo artillero del equipo y especialista en penas máximas se dispuso a anotar ese importante penalti y no lo falló, poniendo el definitivo 2-2 en el marcador.
Un resultado positivo en un campo muy complicado que deja la tercera final de Europa League consecutiva a un solo paso. El Sánchez-Pizjuán dictará sentencia y decidirá si el campeón podrá de nuevo revalidar título.
En el otro partido de las semifinales de Europa League, el otro español, el Villarreal CF, ganó por 1-0 al Liverpool y podría ser el rival del Sevilla FC si ambos terminan de encarrilar sus buenos resultados en los partidos de vuelta.
Carlos Barba. @cBarba10 para @VFutbolAndaluz.
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